No podíamos imaginar la acogida que el mismo recibiría. El interés fue general, tanto en los ponentes como en los asistentes. Realmente, Rithmomachia es una propuesta atractiva. Sin embargo, como contábamos con apenas treinta minutos, solo pudimos dar un vistazo general que fue casi como la entrada del blog anterior a ésta. Fuimos con una presentación pdf, a la que llamamos Rithmomachia: batalla rítmica de los números y que ustedes pueden descargar haciendo click en el nombre; en ella conseguirán algo de la historia del juego, sus fundamentos y sus reglas. Está pensado como una presentación, así que debe leerse como tal.
Sin embargo, es bueno aclarar que el anterior no puede considerarse un documento definitivo. A medida que vamos conociendo el juego aparecen nuevos documentos y nuevas voces con las que entramos en contacto: unas veces reafirman nuestras ideas, otras nos las cambian. En este mismo momento, una afirmación que hicimos de manera tajante en la presentación está sujeta a revisión. Así que ya saben.
Lo que andamos buscando en este momento es construir un conjunto de reglas a las cuales podamos llamar "reglas venezolanas de Rithmomachia". No se vaya a creer que con esto estamos haciendo una especie de búsqueda iconoclástica de originalidad. No. Por el contrario, es posible que no estemos haciendo otra cosa que seguir el espíritu medieval; Ann Moyer, una de nuestras fuentes principales, nos dice (Pág. 12): "Las reglas de juego estaban sujetas a cierto número de variaciones. En realidad, algunas fuentes sugieren que los jugadores podían acordar de antemano reglas específicas, dando así la posibilidad de jugar de acuerdo a los niveles de habilidad." (La traducción es mía, así que disculpan cualquier error o inexactitud.) Pero nosotros seguimos consultando.
Por lo pronto, las actividades del Club Venezolano de Rithmomachia (con sede en la UCV) van hacia adelante, aun cuando no tenemos la aceptación oficial de la institución, la cual estamos esperando. Hasta ahora hay una treintena de personas en su nómina, aunque no todos ellos han comenzado a jugar. Pero en realidad es muy fácil hacerlo. El documento anterior anterior muestra que una cartulina resistente es un buen material de construcción del tablero y las piezas. Si no disponen de un compañero cercano para jugar, pueden hacerlo con alguno que esté a distancia: en el documento se describe la notación algebraica -desarrollada por nosotros mismos- para describir cada jugada.
También estamos en la construcción de nuestra plataforma de comunicación;
tenemos correo electrónico:
club.rithmomachia.ucv@gmail.com;
síguenos en twitter por
@rithmomachiaucv
y además disponemos de un blog
http://rithmomachiaucv.blogspot.com.
Todos los instrumentos anteriores estarán a la disposición de las personas que quieran sumarse a cualquier actividad relacionada con Rithmomachia. De hecho, el blog estará abierto a las colaboraciones las cuales, por supuesto, se publicarán con el nombre del colaborador y deben ser enviadas al correo electrónico antes de su publicación, incluyendo sus gráficas, si fuera el caso. Como es de esperar, las modificaciones que hagamos al documento Rithmomachia: batalla rítmica de los números, también serán notificadas en el blog oportunamente.
El Club Venezolano de Rithmomachia es venezolano porque nació en nuestro país, pero no está cerrado a la participación de ciudadanos de otras latitudes que quieran acompañar nuestra inquietud con las propias. De hecho, la historiadora estadounidense Ann Moyer ya es miembro del club y hemos cursado solicitudes de aceptación de membresía a otros conocedores, que nos han dado su apoyo en el conocimiento de las interioridades del juego y su historia.
No hay comentarios:
Publicar un comentario