En mis días de estudiante en el viejo Pedagógico de Caracas, llegó a mis manos un librito de Elementos de historia de las matemáticas, cuya lectura realicé no sin bastante dificultad. (Todavía lo conservo, como pueden ver en la foto... bastante manoseado, por cierto.) El libro contenía aspectos de la historia que incluían hallazgos recientes y estaba firmado por un tal Nicolás Bourbaki. Como en la época ni siquiera podíamos soñar en tener internet, me tocó usar el viejo método de averiguar con los que supone que debían saber y pregunté a uno de mis profesores de álgebra por el dichoso Bourbaki.
Me contestó que se trataba de un general de las tropas napoleónicas. El anacronismo debe haber alargado mi rostro de manera impresionante pues, luego de una sonora carcajada me dijo, en nuestro tono criollo zumbón: “¡No vale... ése es el seudónimo de una partida de locos franceses que escribieron una enciclopedia de matemáticas!”
Por supuesto que continué averiguando y poco después supe que los tales “locos” formaban parte de la flor y nata de la investigación matemática europea del siglo XX. El grupo se inició con nombres como los de Henri Cartan, Claude Chevalley, André Weil y Jean Dieudonné (a la derecha, en el mismo orden nombrado), entre otros no menos importantes. Se proponían escribir un tratado de matemática que mostrara la forma en la que debía enseñarse todo el contenido de la matemática superior conocida hasta el momento.
La selección del apellido (que no del nombre) de un general napoleónico es una muestra del humor con el que se inició la empresa. Siendo André Weil estudiante bisoño de la Escuela Normal Superior, asistió a una falsa conferencia dictada por un alumno de los cursos superiores, disfrazado de ilustre profesor extranjero visitante. El disfraz incluía barba y acento y la conferencia consistía en cierto número de falsos y ridículos teoremas, designados con nombres de militares de las filas napoleónicas. El último de estos “teoremas” fue adjudicado a Charles Soter Bourbaki.
Con bromas y demás, el proyecto Bourbaki se mostró sólido desde sus inicios y la tarea, a pesar de lo ingente, generó una obra de referencia obligada en el espectro matemático mundial. Pero sigamos con el humor. Otra anécdota refiere que el matemático Ralph Boas, el muy serio jefe editorial de la revista Mathematical Reviews, escribió un artículo en referencia al grupo y comentaba certeramente el uso del seudónimo Nicolas Bourbaki. Pues bien, recibió una enérgica carta firmada por el propio Nicolas Bourbaki, reclamándole de manera airada el haberle negado el derecho a la existencia y se preguntaba si el tal apellido Boas no sería un seudónimo colectivo de los editores de la revista.
El proyecto Bourbaki ha cambiado en sus setenta años de existencia; recibe críticas y elogios por igual, pero se mantiene vivo y proyecta su influencia no solo en el ámbito de la matemática, sino también dentro de lo que se suele llamar humanidades. Algunos de los científicos sociales que han recibido asesoría del grupo son el antropólogo Claude Levi-Strauss y el psicoanalista Jacques Lacan. Parece ser que aún siguen el lema de André Weil: todos deben interesarse en todo.
A mi me llegó este libro cuando estudiaba bachillerato, la advertencia de mi profesor era que iba ser demasiado profundo para mí y tomando seriamente la advertencia, se lo devolví sin ni siquiera haber hojeado ni una sola página. Años después cuando vi Algebra III con el profesor Rafael Sánchez (uno de mis más admirados y respetados profesores) me entero un poco más de la "verdadera cara" de Nicolás Bourbaki y su "grupo de genios" que lo conformaban. Este es uno de los pasajes más anecdótico que poseen las matemáticas. Los libros de Bourbaki son extremadamente difíciles de leer en especial aquellos que están marcados con su famoso "dangerous bend" algo como un apartado con triple asterisco en orden de dificultad. Gracias Douglas por siempre traer a la mesa temas tan interesante de nuestra profesión, arte, pasión o como quiera que se llame a la matemática. Un abrazo
ResponderEliminarGracias Tomás, está interesante lo del "dangerous bend".
ResponderEliminarCon respecto al "dangerous bend" hay un artículo en Wikipedia sobre el mismo, remito el enlace
ResponderEliminarhttp://en.wikipedia.org/wiki/Bourbaki_dangerous_bend_symbol
Abrazos
Gracias por el enlace... muy bueno.
ResponderEliminarGracias Tomás, por lo que me toca
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